miércoles, 4 de julio de 2012

Anécdotas del turno de oficio

Estimados lectores:

Como sabéis, soy abogado del turno de oficio, y como tal cobramos mal y tarde, además de ser vilipendiados por las cabezas bienpensantes de este país. Respecto a esto he de decir, que los abogados mejor formados y los más peligrosos para tener como contrarios son los del turno de oficio. Es más, siempre he dicho, que prefiero tener de contrario a un abogado de Garrigues o Clifford Chance o Price Waterhouse, que a un abogado que tiene su propio despacho o uno del turno de oficio, porque los de los grandes despachos suelen ser asalariados que acaban de entrar, mal pagados y desmotivados; mientras los otros, o se juegan los cuartos o tienen más conchas que un galápago.

Está mal que lo diga, pero me lo paso tan bien en las guardias del turno de oficio, que las haría gratis, ya que aparte de lo que aprendo como abogado, te encuentras con lo "más granado de la sociedad", gitanos, inmigrantes, caraduras, etc., lo cual te sirve para hacerte en tu cabeza un estudio sociológico de los habitantes que pululan por España.

Yo siempre he sido un amante de las películas llamadas "malas" con su galería de personajes que me recuerdan a las personas, que he tenido que defender en algún procedimiento del turno de oficio, con frases que serían dignas de formar parte de un guión cinematográfico. Prefiero cualquiera de estas películas que "Muerte en Venecia" o "Fanny y Alexander", filmes cuyo visonado utilizaría en la guerra para atormentar al enemigo.

Por ejemplo en la película Blanco Humano, hay dos grandes frases: "Te voy a dar tantos derechazos, que me suplicarás que te pegue con la izquierda" y "Mi apellido es Riesgo, porque mi madre corrió uno al tenerme".

En "Karate mortal en Torremolinos" dicen: "¿Quieres saber lo que es coger tus dientes con los dedos rotos?" o "He tenido una idea" y contesta el otro: "pues ten cuidado que te quedan tres"

Eso sin contar con la gran película el Sargento de Hierro, cuando dice Clint Eastwood: "¿Cuánto mides?" y le contestan: "1,80", "nunca vi una mierda tan alta". O dice: "Que te haya salvado la vida no significa que intercambiemos saliva juntos en la ducha".

Pues ese tipo de personajes me los encuentro yo en la guardias del turno de oficio constantemente. A continuación va una serie de anécdotas totalmente reales que me han acontecido en asuntos del turno de oficio.

1.- En un juicio por delito de conducir sin carné de conducir; le pregunto al acusado: ¿tenía permiso para conducir" y me contesta: "Sí, el coche era de mi padre y me dio permiso para que lo condujera"

2.- En otro juicio por conducir sin permiso, me dice el acusado, "Sr. letrado dése prisa, que tengo a mi familia esperando en el coche y les tengo que llevar a casa"

3.- En otro juicio, el Fiscal pregunta al acusado y éste no hace más que mirarme; el juez se enfada y le dice: ¡Diríjase al Ministerio Fiscal!. De pronto, el acusado, se dirige hacia la puerta con intención de abandonar la sala y le dice el juez: ¡A dónde va!, y le contesta el acusado: !Al ministerio ese que me ha dicho!

4.- En un juicio de Violencia de Género pregunta el Fiscal a la mujer,: "...entonces, ¿el matrimonio no se había consumado" y le contesta: ¡Sí totalmente consumido!

5.- En un robo con fuerza, cogen a 5 dentro de un casa. Pregunta el juez a uno: ¿qué hacía usted en la casa? y contesta: "Fui a pintar la casa" "¿Y las otras cuatro personas que se hallaban dentro" vuelve a preguntar el juez, contesta el acusado: "Fueron a llevarme el bocadillo"

6.- En otro robo con fuerza, cogen a un indigente zarrapastroso que olía mal con cuarenta colonias de Carolina Herrera. Le pregunta la jueza: "¿De dónde ha sacado las colonias", "son para mí uso personal" contesta el acusado. "¿Cuarenta colonias? pregunta el juez. "Me las compro para todo el año" contesta el acusado.

7.- A otro que le acusan de haber robado el GPS de un coche. Le pregunto en la entrevista qué le pasó y me contesta: "vinieron uno chavales me dieron un martillo y un GPS y salieron corriendo"

8.- Otro que le acusan de haber robado un GPS en un coche. Este fue su relato de los hechos: "Iba andando por la calle, estalló el cristal del coche, cogí el GPS y fui a dárselo a su dueño"

Tengo infinidad de ellas que iré contando otros días. Me dejo para otro día la de la redada de "Las Rosillas" y la del "beso del sueño", porque esas dos, merecen un artículo completo... ...y como dijo el otro: ...lo bueno si breve, dos veces bueno.

FDO: EXCMO. SR. MARQUES DE CORDOBA

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